En México no es obligatorio incluir una asignatura de educación en sexualidad, a pesar de que las Naciones Unidas lo recomienda para fomentar la igualdad de género, la no discriminación y la salud reproductiva de los jóvenes. Además, los derechos sexuales y reproductivos son universales, y para protegerlos y hacerlos realidad es necesario que los jóvenes puedan acceder a una educación integral y de calidad en esta materia. Para dar respuesta a esta necesidad, nace EducaSex Academy, un programa educativo para escuelas, institutos y universidades de México que propone charlas y actividades relacionadas con la sexualidad a nivel biológico, social o psicológico. Su principal objetivo es empoderar a los jóvenes brindándoles información fundamental sobre su salud y sus derechos en materia de reproducción y relaciones sexuales para que puedan tomar decisiones libres de coacciones, violencias, discriminación y estereotipos.Y es que, la educación sexual no es sólo higienista, sino que incluye embarazos, enfermedades de transmisión sexual y el conocimiento sobre la libertad propia y la del otro. Las consecuencias de no recibir una educación sexual adecuada son devastadoras. Por ejemplo, se calcula que cada día se infectan con el VIH 3.000 jóvenes.Además, al contrario de lo que se piensa, la educación sexual no consiste en incitar a la práctica sexual desde pequeños o a ser promiscuos. De hecho, los estudios demuestran que la educación sexual tiene el efecto contrario, ya que enseña a tomar conciencia sobre los riesgos, conocer cómo pueden paliarse y, sobre todo, a respetar la intimidad y la postura de otra persona.