Todos los seres humanos tienen talento. El reto radica en descubrir cuál es y cómo puede contribuir este al bienestar propio y al de los demás, dentro de una organización.La felicidad laboral, entendida como bienestar en el trabajo, no deja de ser una estrategia que se aplica a empresas que requieren un proceso de transformación, sin perder sus rendimientos empresariales e incluso aumentando su productividad. Pero, ¿es una moda o un argumento sólido que aporta un valor diferencial en el clima y cultura de una empresa?En The Smilist no se nos pasó por alto este dato de la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo: por cada euro invertido en salud y seguridad profesional, una empresa logra un retorno medio de 3,6 euros. Revelador, ¿verdad?Nuestra misión es que en las empresas cada lunes parezca viernes. Los climas sanos, creativos y optimistas se combinan con el realismo necesario para afrontar, resolver y prever problemas, algo tan humano como las propias personas.En esos huracanes que se levantan a veces es cuando entramos en acción, apoyando a los departamentos de recursos humanos o a su dirección, según el caso, y lo hacemos escuchando mucho y confiando en la valía de las personas. A partir de ahí aportamos soluciones realistas mediante dinámicas y metodologías específicas, alineadas con los objetivos de negocio. Pero hay algo más allá de nuestra sonrisa y entusiasmo contagioso.En The Smilist contamos con nuestra ÓPTICA GLOWING PEOPLE, una perspectiva transversal propia que aplicamos a metodologías adecuadas, de tal manera que las personas se desbloquean y crecen, sintiéndose parte de la organización y de su transformación, todo ello de forma orgánica. En esa cercanía es donde construimos escenarios seguros donde las empresas avanzan poco a poco hacia su visión, ese el destino al que es posible llegar si se está bien equipado.